Drupal 7 ha sido durante más de una década una de las versiones más utilizadas del sistema de gestión de contenidos (CMS) Drupal. Pero el tiempo no perdona, ni siquiera al software de código abierto. Con el anuncio oficial del fin del soporte para Drupal 7, ha llegado el momento de tomar decisiones estratégicas y técnicas cruciales. Este artículo es una guía completa, detallada y técnica sobre qué hacer ahora, cuánto puede tardar la migración y cómo llevarla a cabo sin poner en riesgo tu infraestructura digital.
Si tu empresa todavía opera con Drupal 7, estás en una situación delicada: tu sitio web está expuesto a vulnerabilidades de seguridad, problemas de compatibilidad tecnológica y limitaciones de rendimiento. Pero no te preocupes, aquí no hablamos de magia, sino de ciencia aplicada al desarrollo web. Vamos a analizar el panorama actual y diseñar una hoja de ruta técnica y realista para dar el salto sin perder estabilidad, SEO ni funcionalidades clave.
Desde el 5 de enero de 2025, Drupal 7 ya no cuenta con soporte oficial por parte de la Drupal Association ni de la comunidad. Esta decisión marca el cierre de un ciclo importante dentro del ecosistema Drupal y obliga a todos los proyectos que aún dependen de esta versión a reconsiderar urgentemente su hoja de ruta tecnológica.
La falta de soporte implica la ausencia de actualizaciones de seguridad, el estancamiento de los módulos contribuidos y el aislamiento progresivo frente a nuevas tecnologías. En consecuencia, mantenerse en Drupal 7 no es solo una cuestión técnica, sino una amenaza directa para la sostenibilidad y la seguridad de cualquier entorno digital basado en esta versión.
Sin el soporte oficial, Drupal 7 deja de recibir actualizaciones de seguridad periódicas por parte de la comunidad y la Drupal Association. Esto significa que cualquier vulnerabilidad futura detectada en el núcleo del sistema quedará sin solución, aumentando progresivamente el riesgo de explotación por parte de atacantes.
A diferencia de versiones aún soportadas, ya no se publicarán parches de emergencia ni se ofrecerán canales oficiales para reportar o atender incidencias de seguridad. Las empresas que mantengan esta versión se verán forzadas a asumir estos riesgos o contratar servicios especializados muy costosos.
Esto convierte cada línea de código de un sitio en Drupal 7 en un potencial vector de ataque, especialmente si el sitio procesa datos personales, información financiera o gestiona accesos de usuarios registrados.
El ecosistema tecnológico no espera a nadie. A medida que PHP, MySQL, Apache y otros componentes del stack evolucionan, Drupal 7 queda cada vez más rezagado en compatibilidad. La falta de parches hace que nuevas versiones de estos entornos puedan romper funcionalidades clave del sitio web.
Los servidores que se actualicen para cumplir con requisitos de seguridad o normativos podrían dejar de ser compatibles con Drupal 7, generando errores críticos o interrupciones de servicio. Esto obliga a mantener entornos antiguos, lo cual añade una capa de complejidad y vulnerabilidad adicional.
Además, muchas empresas de hosting ya están eliminando el soporte para versiones de PHP antiguas, lo cual pone en jaque la continuidad operativa de los sitios que aún utilizan Drupal 7.
Gran parte del poder de Drupal reside en su ecosistema de módulos contribuidos. Con el fin del soporte oficial de Drupal 7, muchos mantenedores de módulos han dejado de actualizarlos o directamente los han marcado como obsoletos.
Esto significa que funcionalidades clave, como integración con pasarelas de pago, sistemas de comentarios, SEO avanzado o autenticación externa, pueden quedar inoperativas o vulnerables. Migrar a versiones más recientes puede requerir desarrollar soluciones personalizadas desde cero.
También desaparece la garantía de compatibilidad entre módulos, lo que puede derivar en conflictos, errores o comportamientos imprevisibles que afecten directamente a la experiencia del usuario y al rendimiento del sitio.
El frontend de muchos sitios en Drupal 7 depende de librerías JavaScript antiguas o versiones desactualizadas de HTML y CSS. Con el paso del tiempo, estas tecnologías pierden compatibilidad con los navegadores modernos, generando errores de visualización o funcionalidades rotas.
Además, muchas APIs y servicios externos han actualizado sus protocolos de seguridad y autenticación. Un sitio en Drupal 7 puede dejar de poder conectarse correctamente con plataformas como Google Maps, Stripe, Mailchimp o redes sociales debido a estas actualizaciones.
Mantener la interoperabilidad con servicios de terceros se vuelve cada vez más complejo, costoso y poco fiable, afectando la funcionalidad general del sitio web y su capacidad para ofrecer una experiencia competitiva al usuario.
Este escenario deja a los sitios basados en Drupal 7 en una situación crítica desde el punto de vista técnico y de seguridad.
Continuar utilizando Drupal 7 puede exponer a tu organización a:
La seguridad de los datos es una prioridad en cualquier organización, especialmente en aquellas que gestionan información confidencial. Drupal 7, al no recibir más actualizaciones de seguridad, deja abiertas múltiples puertas de entrada para atacantes que buscan explotar vulnerabilidades conocidas.
Estas filtraciones pueden tener consecuencias graves, desde pérdida de confianza del usuario hasta sanciones legales y económicas. En un entorno cada vez más regulado, la exposición a ataques puede representar una amenaza real para la continuidad del negocio.
Además, los atacantes suelen enfocarse en sistemas obsoletos precisamente porque saben que son más fáciles de vulnerar, lo que convierte a Drupal 7 en un objetivo prioritario para exploits automatizados y bots maliciosos.
Los motores de búsqueda como Google priorizan la velocidad de carga, la compatibilidad móvil y la experiencia del usuario. Drupal 7, al estar desactualizado tecnológicamente, suele presentar deficiencias en estos aspectos, lo que repercute directamente en su posicionamiento orgánico.
Problemas como tiempos de carga elevados, errores en el frontend o fallos en la estructura semántica del HTML pueden hacer que tu sitio caiga en los resultados de búsqueda. Esto afecta tanto al tráfico como a la visibilidad de marca.
A esto se suma la dificultad de integrar herramientas modernas de análisis SEO o nuevas funcionalidades técnicas recomendadas por Google, como Core Web Vitals, que ya no son compatibles con Drupal 7 sin desarrollos específicos.
Las normativas como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales (LOPDGDD) exigen medidas técnicas adecuadas para proteger los datos personales. Usar software sin soporte puede considerarse una negligencia.
Drupal 7, al carecer de parches y mejoras continuas, no puede garantizar una respuesta adecuada ante vulnerabilidades, lo cual incumple con el principio de «seguridad por diseño y por defecto» exigido por estas normativas.
Este incumplimiento puede derivar en sanciones económicas y pérdida de credibilidad frente a clientes, usuarios y autoridades. Es un riesgo legal que muchas empresas aún subestiman hasta que enfrentan una auditoría o una brecha de seguridad.
Aunque a primera vista mantener Drupal 7 puede parecer más económico que migrar, en realidad implica una serie de costes ocultos a medio y largo plazo. Desde horas de desarrollo necesarias para aplicar parches manuales, hasta gastos de infraestructura por tener que mantener servidores antiguos.
Además, muchos proveedores comienzan a dejar de dar soporte a versiones antiguas de software, lo que obliga a contratar servicios especializados más caros o asumir riesgos que antes estaban cubiertos por actualizaciones regulares.
También se pierde la oportunidad de automatizar tareas, mejorar procesos y optimizar la eficiencia del equipo de desarrollo, lo que a la larga afecta al retorno de la inversión digital y frena la innovación tecnológica de la empresa.
Drupal 10 es la versión más reciente, moderna y robusta del ecosistema. No solo supone una mejora sustancial respecto a Drupal 7 en cuanto a rendimiento y seguridad, sino que también establece un nuevo estándar en experiencia de usuario, escalabilidad y mantenimiento a largo plazo.
Desarrollado sobre tecnologías actuales y mantenido activamente por una comunidad global, Drupal 10 ofrece una plataforma preparada para los retos digitales del presente y del futuro. Su arquitectura está diseñada para soportar proyectos complejos, con integraciones flexibles y una base sólida que permite iterar, crecer y adaptarse con agilidad.
Drupal 10 ha sido reescrito sobre una base moderna, lo que permite una estructura de código más limpia, ligera y mantenible. Esto facilita las tareas de desarrollo, reduce errores y mejora la eficiencia del sitio web.
Gracias a esta base renovada, los sitios en Drupal 10 disfrutan de mejores tiempos de respuesta y menor consumo de recursos, lo cual repercute directamente en la experiencia de usuario y el rendimiento general.
Además, esta limpieza interna sienta las bases para una evolución más ágil del CMS, permitiendo integrar nuevas funcionalidades sin arrastrar limitaciones del pasado, algo imposible en versiones como Drupal 7.
La inclusión de CKEditor 5 transforma la experiencia de edición de contenidos en Drupal 10, ofreciendo una interfaz más intuitiva, potente y con mayores capacidades de personalización. Esto mejora notablemente la productividad de los equipos de marketing y comunicación.
Por otro lado, la adopción de Symfony 6 y Twig 3 como frameworks subyacentes acerca Drupal a los estándares actuales del desarrollo PHP moderno. Esto facilita la incorporación de talento técnico, reduce la curva de aprendizaje y mejora la seguridad del sistema.
Estas tecnologías permiten crear estructuras modulares, más seguras y flexibles, que hacen posible el desarrollo de funcionalidades avanzadas y mejor integración con sistemas externos.
Drupal 10 incorpora de forma nativa mejoras para la compatibilidad móvil, asegurando que los sitios respondan de forma óptima en dispositivos de todo tipo. Esto no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también es un factor crítico para el posicionamiento en buscadores.
A nivel de accesibilidad, la versión 10 está alineada con las últimas normativas WCAG, garantizando que los contenidos sean usables para personas con distintas capacidades. Esto es especialmente importante en sectores públicos y educativos.
En cuanto al SEO técnico, Drupal 10 permite una mejor estructura del HTML, mayor rapidez de carga y herramientas más modernas para optimizar metadatos, URLs limpias y conectividad con herramientas como Google Search Console.
Uno de los mayores beneficios de migrar a Drupal 10 es la tranquilidad que ofrece su horizonte de soporte. Se estima que tendrá soporte oficial hasta al menos el año 2029, lo que permite planificar con visión de largo plazo.
Esto significa que los equipos técnicos no tendrán que preocuparse por una nueva migración en el corto plazo, lo que reduce el estrés operativo y permite concentrarse en mejoras funcionales o estratégicas.
Además, durante este periodo, se garantiza el acceso a actualizaciones de seguridad, mejoras continuas y soporte de la comunidad, algo que Drupal 7 ya no puede ofrecer y que impacta directamente en la sostenibilidad tecnológica del proyecto.
Migrar directamente de Drupal 7 a Drupal 10 no es sencillo, pero es una inversión tecnológica estratégica.
En algunos casos (por ejemplo, si tu web solo es un blog o una landing), este tipo de proyectos suelen tener estructuras simples, pocos tipos de contenido y dependencias limitadas a funcionalidades básicas. Eso abre la puerta a considerar otras plataformas CMS que, si bien no tienen la robustez de Drupal, sí ofrecen rapidez de implementación y menor coste de mantenimiento.
Sin embargo, cambiar de CMS implica reevaluar desde cero la lógica de negocio, la arquitectura de datos y las integraciones actuales. Aunque puede parecer tentador por el menor esfuerzo aparente, elegir bien el nuevo CMS es clave para no acabar en una plataforma que limite el crecimiento futuro o comprometa funcionalidades esenciales.
WordPress es una alternativa viable si el proyecto digital no requiere estructuras complejas ni funcionalidades demasiado personalizadas. Es ideal para blogs, sitios corporativos básicos o landing pages enfocadas a marketing, donde la prioridad es la rapidez de implementación y la facilidad de uso.
Su comunidad global, gran cantidad de temas y plugins, y curva de aprendizaje reducida hacen que sea una de las plataformas más accesibles para equipos sin formación técnica especializada. Además, su panel de administración es uno de los más intuitivos del mercado.
Sin embargo, esta simplicidad también implica limitaciones. Si vienes de Drupal 7 y tu sitio contiene estructuras de datos personalizadas o workflows complejos, WordPress puede requerir muchos plugins y adaptaciones que afecten al rendimiento o a la seguridad.
Estas plataformas representan alternativas más potentes y estructuradas que WordPress, pero con una comunidad y ecosistema mucho más reducidos en comparación con Drupal. Podrían ser una opción válida si tu equipo ya cuenta con experiencia previa o si tu infraestructura tecnológica ya está alineada con alguna de ellas.
Joomla ofrece una arquitectura relativamente flexible y una gestión avanzada de usuarios y permisos, aunque su evolución ha sido más lenta en los últimos años. Typo3, por su parte, es especialmente popular en ciertos mercados europeos por su enfoque corporativo y su capacidad para manejar sitios multilingües y multisite.
El mayor reto con estas alternativas es la migración de datos desde Drupal 7, ya que no existen herramientas automatizadas estándar para este tipo de migración, lo que obliga a desarrollar procesos a medida.
Los CMS headless están ganando protagonismo por su enfoque desacoplado, que separa completamente el backend del frontend. Esto permite usar frameworks modernos como React, Vue o Angular para crear experiencias frontend avanzadas conectadas vía API a un gestor de contenidos ligero y ágil.
Strapi, Contentful y similares ofrecen flexibilidad total para desarrollar sitios y aplicaciones en múltiples canales, ideales para proyectos omnicanal o para organizaciones con necesidades avanzadas de personalización de frontend.
No obstante, esta opción requiere un equipo con experiencia en desarrollo frontend moderno y una arquitectura bien pensada. Además, la migración desde Drupal 7 a un CMS headless es un cambio de paradigma, no solo técnico sino también organizativo, por lo que debe plantearse como una reestructuración completa del proyecto digital.
Pero si vienes de Drupal 7, lo más coherente suele ser seguir en el ecosistema Drupal para aprovechar el conocimiento y la arquitectura ya existente.
Algunas empresas ofrecen mantenimiento de Drupal 7 tras el fin de su soporte oficial, también conocido como EOL (End of Life). Esta opción consiste en contratar servicios de soporte privado que se encargan de parchear vulnerabilidades de forma manual, mantener la compatibilidad con entornos tecnológicos más recientes y prolongar la vida útil del sitio web por un tiempo limitado. Sin embargo, no es una solución sostenible ni escalable, y su coste suele ser considerable.
Esta alternativa solo debería contemplarse si existen dependencias técnicas muy específicas que imposibiliten la migración inmediata. Por ejemplo, integraciones con sistemas propietarios que no han sido actualizados, flujos de trabajo internos extremadamente complejos o funcionalidades desarrolladas a medida que requieren de una reingeniería completa para adaptarse a Drupal 10 u otro CMS.
También puede ser una solución provisional si el sitio es tan extenso o crítico que requiere meses de planificación y desarrollo para asegurar una migración sin errores. En este caso, el soporte extendido actúa como un «puente tecnológico» mientras se prepara la nueva infraestructura, pero debe usarse con una fecha de expiración bien definida.
La migración no es una tarea menor. El tiempo varía en función de:
Cuanto mayor es el volumen de contenido, más compleja será la migración desde Drupal 7. Sitios con miles de nodos, múltiples tipos de contenido, usuarios con roles personalizados y estructuras de taxonomía detalladas requieren planificación específica para asegurar que toda la información se transfiera de forma precisa y sin pérdida de integridad.
Además, un alto volumen de datos puede aumentar significativamente los tiempos de procesamiento durante la migración. Será necesario aplicar técnicas de segmentación de contenidos, pruebas de migración por lotes y verificación estructurada para evitar duplicidades o errores.
Drupal 7 se caracteriza por una fuerte dependencia de módulos contribuidos. A mayor cantidad de estos módulos, especialmente si han sido modificados o personalizados, más trabajo requerirá la migración. Muchos módulos de Drupal 7 no tienen versiones equivalentes en Drupal 10, lo que obliga a buscar alternativas o desarrollar funcionalidades personalizadas.
También es habitual que los módulos más antiguos hayan dejado de mantenerse, lo que representa un reto adicional. Analizar el mapa de dependencias entre módulos, evaluar sus funciones y decidir qué migrar, qué reescribir y qué desechar es clave para una transición ordenada y segura.
Si tu sitio en Drupal 7 cuenta con un tema personalizado, la migración del diseño puede ser uno de los aspectos más complejos. Drupal 10 utiliza un sistema de theming basado en Twig que difiere completamente del motor de plantillas de Drupal 7, por lo que el tema actual no será compatible de forma directa.
Esto requiere rediseñar o adaptar el tema desde cero, teniendo en cuenta tanto la apariencia visual como la estructura semántica del HTML, la accesibilidad y la experiencia del usuario. También puede ser una oportunidad para modernizar el diseño, adoptar buenas prácticas de rendimiento y aplicar una lógica móvil-first.
Las integraciones con herramientas externas como ERPs, CRMs, sistemas de autenticación o servicios de terceros añaden complejidad a la migración. Cada una de estas integraciones debe ser revisada, adaptada y probada en el nuevo entorno para asegurar su funcionamiento continuo.
Además, muchas de estas integraciones pueden depender de módulos contribuidos en Drupal 7 que no existen en Drupal 10, lo que exige rediseñar la lógica de conexión, autentificación y sincronización de datos. Esto requiere una coordinación estrecha con los responsables de los sistemas conectados para evitar caídas o inconsistencias en los procesos críticos.
Son los módulos oficiales del ecosistema Drupal para migraciones estructuradas. Permiten definir procesos controlados para mover contenido desde Drupal 7 a Drupal 10, incluyendo tipos de contenido, usuarios, archivos y taxonomías.
Ofrecen gran flexibilidad y pueden combinarse con scripts personalizados para adaptarse a estructuras de datos complejas. Aunque tienen una curva de aprendizaje moderada, son la opción más segura y potente para migraciones empresariales.
Es importante configurar correctamente los mappings de campos y las transformaciones necesarias, así como ejecutar pruebas unitarias en entornos de staging antes de aplicar la migración en producción.
Esta herramienta ayuda a identificar qué módulos de Drupal 7 tienen versión disponible para Drupal 10, cuáles están obsoletos y qué dependencias debes resolver. Aunque no realiza la migración por sí misma, es muy útil para planificar el trabajo previo y tomar decisiones técnicas fundamentadas.
También puede analizar código personalizado para sugerir cambios que deben aplicarse para que sea compatible con las versiones modernas del CMS. Esto permite anticipar esfuerzos de refactorización y definir prioridades.
Ideal para proyectos con muchos módulos personalizados o con historial de actualizaciones irregulares que dificulten la trazabilidad del código.
Drush sigue siendo una herramienta esencial en cualquier migración desde Drupal 7. Permite ejecutar tareas administrativas desde consola, automatizar tareas recurrentes y gestionar scripts de migración o limpieza de datos.
En combinación con herramientas de CI/CD como GitLab CI o GitHub Actions, permite orquestar migraciones controladas, crear backups automatizados y aplicar pruebas integradas, lo que mejora la fiabilidad y repetibilidad del proceso.
Utilizar estas herramientas correctamente puede reducir errores humanos y mejorar la trazabilidad de cada fase de la migración, especialmente en proyectos grandes o multisite.
Sí, pero es altamente desaconsejado. Aunque técnicamente el sitio puede seguir funcionando, estará expuesto a vulnerabilidades de seguridad, falta de soporte en módulos y creciente incompatibilidad con nuevas tecnologías.
Además, mantener Drupal 7 puede representar un coste oculto importante: infraestructura antigua, falta de desarrolladores disponibles y limitaciones a la hora de escalar el proyecto o añadir nuevas funcionalidades.
Lo más recomendable es planificar la migración lo antes posible y evitar situaciones de dependencia que se vuelvan insostenibles a medio plazo.
Actualmente, la recomendación es migrar directamente a Drupal 10. Drupal 9 y 10 son muy similares a nivel de arquitectura, y el esfuerzo de migración desde Drupal 7 es prácticamente el mismo en ambos casos.
Pasar por Drupal 9 solo añade una capa extra de trabajo que deberá repetirse al migrar luego a la versión 10. En cambio, apuntar directamente a la última versión te garantiza mayor soporte y una vida útil más larga.
Asegúrate de que todos los módulos que necesitas estén disponibles en Drupal 10 o cuenten con alternativas estables.
Los módulos personalizados representan uno de los mayores retos en la migración desde Drupal 7. Deberás revisarlos uno a uno, identificar sus funcionalidades y decidir si deben migrarse, refactorizarse o eliminarse.
En muchos casos, funcionalidades antiguas pueden implementarse de forma más eficiente con nuevas herramientas o módulos del core en Drupal 10. También es posible que algunas ya no sean necesarias por cambios en la lógica del negocio.
Contar con un equipo de desarrollo que conozca bien el código fuente y el framework moderno de Drupal es clave para realizar este análisis de forma eficaz y segura.
La obsolescencia de Drupal 7 no es una simple anécdota tecnológica, sino un punto de inflexión estratégico para todas las organizaciones que aún lo utilizan. Más allá de la urgencia por motivos de seguridad o soporte, este cambio representa una oportunidad para modernizar, optimizar y hacer evolucionar tu presencia digital.
La migración no es un camino trivial, pero con planificación adecuada, herramientas idóneas y un equipo técnico competente, puede transformarse en una mejora profunda de tu infraestructura digital. Es el momento perfecto para revisar tus necesidades, eliminar lo que ya no aporta y construir un entorno más eficiente y escalable.
Si tu organización aún trabaja con Drupal 7, el momento de actuar es ahora. No hay fórmulas mágicas, pero sí estrategias bien definidas que aseguran una transición exitosa hacia una web más moderna, segura y preparada para el futuro.
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